El aluminio es el metal no ferroso más abundante que se encuentra en el planeta y sus propiedades permiten una amplia gama de aplicaciones, siendo una de las más utilizadas en todo el mundo, en los sectores industriales más diversos.
El uso de aluminio es mayor que el de cualquier otro metal, excepto el acero, sin embargo, el aluminio tiene mayor flexibilidad y ventajas sobre el acero. Entre sus características destacan su durabilidad y alta resistencia, ligereza, conductividad eléctrica y térmica, resistencia a la corrosión, el aluminio es la única barrera 100% eficiente contra la humedad, el oxígeno y la luz y es sostenible, ya que el aluminio puede ser Reciclado sin fin.
El metal se obtiene del mineral de bauxita, a través de un proceso de refinamiento, que resulta en alúmina y, más tarde, en aluminio, después de un proceso electroquímico. Sin embargo, la fabricación del metal a partir del reciclaje emite un 95% menos de gases de efecto invernadero, reduce la extracción de mineral de la naturaleza y en el proceso de reciclaje del aluminio no hay pérdida de sus propiedades, además de ser más simple en comparación con otros materiales y es más rentable para los recolectores.
El aluminio se encuentra en varios sectores de la industria, como la construcción civil, automoción, telefonía, transmisión eléctrica, bienes de consumo y embalaje. En una conferencia rápida en los estantes de los supermercados, es posible encontrar varios paquetes con aluminio en su composición: latas de refrescos y cervezas, paquetes de leche de larga duración, jugos, sellos y tapas, entre otros productos como medicamentos, cosméticos y materiales de empaque. limpieza.
Con tantos beneficios y aplicaciones, el aluminio también aparece en la cartera de productos de “Wyda Embalagens”. Ya sea en el buque insignia de la compañía: papel de aluminio, como en bandejas desechables, bandejas para hornear y envases con tapa para preservar los alimentos y las entregas.
Además de todos los beneficios del aluminio ya mencionados, el embalaje producido a partir de él todavía tiene más ventajas, tanto para las empresas y los comerciantes, como para los consumidores finales.
En la industria y el comercio de este producto, los paquetes son compactos, se pueden apilar de manera optimizada y ocupan menos espacio de almacenamiento, ya sea en existencias o en cajas, lo que permite transportar más volúmenes en menos viajes (lo que también beneficia al medio ambiente, ya que reduce el emisión de gases CO² a la atmósfera).
Para el consumidor final, el empaque de aluminio Wyda brinda practicidad y comodidad, ya que pueden usarse desde la preparación, conservación, transporte hasta el consumo de alimentos. Pueden pasar del congelador al horno, incluido el microondas con total seguridad y sin cambiar las características de los alimentos, garantizando aroma, frescura, sabor, salud y larga vida a los alimentos. Al igual que otros artículos hechos de aluminio, estos paquetes también se pueden reciclar.
En resumen, el aluminio es una solución completa para varios sectores, es 100% reciclable y esencial para la actividad económica del país, ya sea en su producción, uso en el mercado y en su reciclaje.